Una Profesora Demandó A Un Alumno Por Criticar Sus Aplazos
La NaciOnline - 22/09/2006.
ROSARIO.– Para los estudiantes, la matemática puede ser un sueño o una pesadilla. Pero hasta ahora a ninguno le suscitó un problema judicial: salvo al alumno Juan Pablo Calandria, a quien su profesora le inició una demanda civil y otra penal por calumnias e injurias. La docente Ana María Degano le reclamó una indemnización por $ 5000, en concepto de reparación de daños y perjuicios, al enterarse del contenido de una carta que el joven elevó a las autoridades del colegio, en la que se quejaba de que la profesora no le aprobaba los exámenes porque tenía “problemas personales” con él.
Calandria cursó el polimodal en la Escuela Provincial N° 34 Nicolás Avellaneda, en esta ciudad, y el último año se llevó a examen Matemática Aplicada. Después de reprobarla en tres ocasiones, elevó una nota a la rectora del establecimiento, María Carrillo, en la que puso en duda la objetividad de la profesora. “No me dio las mismas oportunidades que a los demás alumnos”, advirtió el alumno en el escrito.
La docente afirma en la demanda que el alumno Calandria menoscabó su honor y su imagen ante la comunidad educativa, al acusarla de “deshonesta, discriminadora, falta de ética, intolerante y corrupta”, entre otros cargos.
“No tuve ningún problema con ella, durante el año casi no cruzamos palabra, salvo cuando levantaba la mano para decir algo en clase", afirmó a LA NACION, Calandria, quien se mostró muy sorprendido por la demanda judicial que presentó la docente.
"No entiendo qué pasó. Nunca tuve nada personal con ella, nunca le discutí nada, ni siquiera en la mesa de examen -añadió-. Cuando me bochaba, me levantaba y me iba."
Después de pedir que cambiaran el tribunal examinador, luego de tres aplazos sucesivos, Calandria dirigió una carta a las autoridades en la que señala que "en los tiempos actuales la corrupción y los amiguismos influyen en todos los niveles de nuestra sociedad, incluso en la escuela".
Y detalla en la misiva: "En mi caso personal, puedo dar fe de las gruesas faltas de la profesora, que van desde el maltrato a los alumnos en general hasta la discriminación de algunos de ellos por razones personales".
El director regional del Ministerio de Educación de la provincia, Humberto Cancela, calificó de "despropósito" la demanda de la docente. Y adelantó que el organismo intervendrá para dilucidar la responsabilidad que tuvo la dirección de la escuela para que se llegara a este punto.
Matemática Aplicada fue la única materia que Calandria se llevó a rendir. Su libreta de calificaciones revela que, más allá de esta área específica, es un alumno aplicado y de buena conducta.
"A mí me gustan las carreras humanísticas", contó el joven, que no pudo entrar en la carrera de Comunicación Social por no terminar el polimodal. "Siempre me costó matemáticas, por eso me la llevé a rendir, y no porque no estudiara o me llevara mal con la profesora", relató.
A los pocos días el alumno recibió una carta documento de Degano, que lo intimó a que se retractara de las "injurias" vertidas en su contra en la nota a los directivos del colegio. "Nunca imaginé que este problema se iba a dirimir en la Justicia", comentó, sin salir de su asombro, el alumno Calandria, y agregó: "En julio se volvió a sentar en la mesa a tomarme examen".
Ante esta situación, los padres del estudiante pidieron que un representante del Ministerio de Educación supervisara el examen. De los once alumnos que se presentaron a rendir, diez aprobaron, entre ellos Calandria.
"El nivel de exigencia de la prueba era menor. Además, no sentí el nerviosismo de tener que enfrentarme solo ante una profesora que tenía un problema personal conmigo y que me había iniciado una causa judicial."
"Yo soy profesor, y nunca se me cruzó por la cabeza hacer una presentación legal por una situación con un alumno", dijo el funcionario ministerial Cancela, al referirse a la denuncia.
Estimó que "cuando hay un problema con un estudiante hay que tratar de resolverlo, de eso se trata el proceso educativo, no de judicializar una situación de aula". "Es evidente que no se supo cómo manejar la situación", enfatizó el funcionario.
"La exigencia es un valor cuando el profesor quiere que un alumno rinda más. Pero es distinto cuando se lo obstaculiza para que no rinda bien -explicó-. En este caso parecería que hay arbitrariedad de parte de la profesora."
"En pedagogía se trabaja sobre el error: la idea es que las equivocaciones dejan las enseñanzas necesarias para crecer", reflexionó Cancela, quien confía en que las partes lleguen a un acuerdo sin tener necesidad de llegar a juicio.
"Problemas entre profesores y alumnos siempre hay, pero nunca han llegado al estrado judicial, quizá porque nunca se había perdido de vista que la educación es más que los contenidos."
2 Comments
La institución cede por demagogia.
Pongan 10 a todos los alumnos. Así quedan todos contentos: el alumno, los padres, la directora y sobre todo el funcionario. ¿Quién se perjudica más? El alumno.
Decimelo a mi, que hace unos días me llamaron a Vicedirección, porque dí más temas de los contenidos que figuran (erróneamente)en el programa, porque no quiere lios con los padres. ¿Dónde se ha visto que un profesor pueda dar mas contenidos que los que figuran en el programa? ... por favorrrrr ... faltaba mas. ¿Que sigue, que los alumnos aprendan? Válgame Dios.
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