Padres Defienden la EEGB Nº 3 - Viernes 01 de Julio

Carta de lectores en El Diario de la Región

Nos dirigimos a usted para poder llegar por su intermedio a la comunidad educativa de la Escuela de Educación General Básica Nº 3 "Antártida Argentina", a la que tenemos la tranquilidad y suerte de pertenecer junto a nuestros hijos.

Queremos dejar en claro desde un primer momento, que no pretendemos iniciar discusión alguna ni mucho menos un enfrentamiento de posturas, simplemente deseamos reconocer públicamente a la institución y el cuerpo docente que a diario recibe a nuestros niños y durante ocho horas los cuidan como si fueran propios.

Somos todos padres trabajadores que necesitamos de la escuela de jornada completa, no como una niñera de ocho horas pagadas por el Estado, sino como un lugar donde existe gente a la que le dejamos con total tranquilidad a nuestros hijos, donde les dan un desayuno y sustentoso almuerzo con postre, además de brindarles una excelente educación, consejos, cuidados, atención y hasta algunos merecidos retos.

¿Quién no tuvo un hijo que no se accidentó jugando en la escuela y comprobó que su maestra, obrando como una madre corrió a auxiliarlo, a contenerlo, hasta nuestra llegada? ¿Y si hablamos de dificultades en el aprendizaje? Bien sabemos que nuestros docentes desde siempre atienden en forma especial a aquellos que así lo necesitan, ayudándolos a superarse y en la formación integral de nuestros hijos ... desde los buenos modales, la forma de comportarse en la mesa, de ser personas decentes con buenos sentimientos, todo esto y mucho más que quizás así de golpe no se ve lo que hacen los maestros de la Escuela Nº 3.

¿El paro? Sí, mentiríamos si dijéramos que no tenemos miedo a que en esta lucha (que no sólo es por el salario, sino también por el sostenimiento de la escuela pública) nuestros niños son los únicos perjudicados con la pérdida del año escolar. Ante este temor, nos preguntamos si no sería bueno que todos los padres nos uniéramos para marchar junto a nuestros maestros ayudándolos así a que el Gobierno los escuche. ¿Y el tiempo perdido? Sabemos por experiencia que se recuperará, que se redoblarán esfuerzos, las ganas y el producto final será muy bueno como siempre. Jamás una batalla docente dejó como saldo a sus alumnos.

Por lo expuesto, queremos decirles a todos y a cada uno de los maestros que plenamente confiamos en ellos.

Nélida Flores, Abel Luis Romero, Eduardo Baser ... y siguen más de 30 firmas.