La emergencia habitacional afecta a casi la mitad de los hogares chaqueños
Pocas posibilidades en los últimos diez años para revertir esta situación
Martes, 10 de Julio de 2012 - Publicado en la Edición Impresa
Recientes informes elaborados por consultoras privadas y organismos públicos destacaron que pese a las mejoras que hubo el Chaco sigue ubicándose como una de las provincias con mayores necesidades de viviendas, por debajo de Formosa y Santiago del Estero.
Son varios los elementos que determinan el déficit en viviendas aunque en el caso del norte del país se relaciona más con una falencia de carácter estructural que solo se puede revertir en un período de décadas.
Hoy el déficit habitacional casi alcanza a la mitad de los chaqueños, mientras que hace 10 años atrás, en plena crisis, el porcentaje de hogares con déficit superaba el 55 por ciento, es decir que la reducción fue de casi 7 puntos porcentuales.
Estos indicadores muestran también la necesidad de que el gobierno nacional ayude proporcionalmente más al norte que a otras provincias del país que hoy tienen menos demandas.
Sin embargo, varios informes de consultoras privadas ponen en duda que los recursos federales se destinen justamente a paliar los problemas habitacionales que se presentan en el país.
Ocurre algo similar con los créditos recientemente ofrecidos por el gobierno nacional para la clase media u hogares con ingresos inferiores a los 5.000 pesos mensuales. Hoy gran parte de las necesidades habitacionales se concentran en los extractos con menos recursos, la gran mayoría de los chaqueños.
También hay que tomar en cuenta que el Chaco es una de las provincias con mayor número de hogares que no tienen siquiera gas licuado para cocinar y también encabeza el ranking de familias sin acceso a cloacas.
Y si se siguen sumando las necesidades que presentan las provincias claramente se puede determinar que la inversión no solo debe ser en viviendas sino también en servicios elementales como agua y cloaca.
La situación dominial
Por otra parte, en el Chaco hay un número importante de soluciones habitacionales que fueron edificadas en terrenos ocupados sin que hasta ahora puedan conseguir un título al menos provisorio.
A tal punto hay un retraso en esta materia que hoy Diputados está debatiendo prorrogar un número importante de expropiaciones y a su vez declarar la emergencia para ir dando respuestas.
El gobierno provincial busca dar una solución a esta falencia pero en lo que va del año y pese a las promesas hay pocos instrumentos disponibles para trabajar con esta grave problemática.
A nivel país
Un informe publicado en La Nación destacó que “a nivel país, el 25,4% de los hogares, unos 3.095.312, posee algún tipo de déficit de vivienda; mientras que el Censo 2001 determinó que era del 30%”.
“Si bien en todas las jurisdicciones hubo progresos en diez años, los problemas de acceso a la vivienda parecen ser estructurales. Claramente el Norte argentino es el área más perjudicada y que evidencia la falta de oportunidades en el acceso a una vivienda digna: en Formosa, Chaco y Misiones, el déficit habitacional promedia al 50% de los hogares. En todas ellas el mayor problema es la presencia de casas con piso de tierra o ladrillo suelto o que no poseen agua por cañería o inodoro”, relató el informe.
“La receta del crecimiento alto económico no resolvió al problema de la vivienda digna, aunque también vale considerar que a cada gobierno local le cabe su cuota de acción. Las enormes divergencias entre provincias se deben fundamentalmente a la migración interna por falta de oportunidades. Muchas familias se trasladan a otras regiones, principalmente áreas metropolitanas”, aseguró la publicación.
“De acuerdo con un informe de SEL Consultores, especializados en economía y desarrollo, en los centros urbanos del país más de la mitad de la población alquila o vive en condiciones de carencias graves o hacinamiento. En todos estos hogares el crédito hipotecario barato solo es equiparable a un sueño: en uno de cada tres nadie trabaja en blanco y el promedio de sus ingresos familiares no supera los $4.500”, destacó.
Hoy el déficit habitacional casi alcanza a la mitad de los chaqueños, mientras que hace 10 años atrás, en plena crisis, el porcentaje de hogares con déficit superaba el 55 por ciento, es decir que la reducción fue de casi 7 puntos porcentuales.
Estos indicadores muestran también la necesidad de que el gobierno nacional ayude proporcionalmente más al norte que a otras provincias del país que hoy tienen menos demandas.
Sin embargo, varios informes de consultoras privadas ponen en duda que los recursos federales se destinen justamente a paliar los problemas habitacionales que se presentan en el país.
Ocurre algo similar con los créditos recientemente ofrecidos por el gobierno nacional para la clase media u hogares con ingresos inferiores a los 5.000 pesos mensuales. Hoy gran parte de las necesidades habitacionales se concentran en los extractos con menos recursos, la gran mayoría de los chaqueños.
También hay que tomar en cuenta que el Chaco es una de las provincias con mayor número de hogares que no tienen siquiera gas licuado para cocinar y también encabeza el ranking de familias sin acceso a cloacas.
Y si se siguen sumando las necesidades que presentan las provincias claramente se puede determinar que la inversión no solo debe ser en viviendas sino también en servicios elementales como agua y cloaca.
La situación dominial
Por otra parte, en el Chaco hay un número importante de soluciones habitacionales que fueron edificadas en terrenos ocupados sin que hasta ahora puedan conseguir un título al menos provisorio.
A tal punto hay un retraso en esta materia que hoy Diputados está debatiendo prorrogar un número importante de expropiaciones y a su vez declarar la emergencia para ir dando respuestas.
El gobierno provincial busca dar una solución a esta falencia pero en lo que va del año y pese a las promesas hay pocos instrumentos disponibles para trabajar con esta grave problemática.
A nivel país
Un informe publicado en La Nación destacó que “a nivel país, el 25,4% de los hogares, unos 3.095.312, posee algún tipo de déficit de vivienda; mientras que el Censo 2001 determinó que era del 30%”.
“Si bien en todas las jurisdicciones hubo progresos en diez años, los problemas de acceso a la vivienda parecen ser estructurales. Claramente el Norte argentino es el área más perjudicada y que evidencia la falta de oportunidades en el acceso a una vivienda digna: en Formosa, Chaco y Misiones, el déficit habitacional promedia al 50% de los hogares. En todas ellas el mayor problema es la presencia de casas con piso de tierra o ladrillo suelto o que no poseen agua por cañería o inodoro”, relató el informe.
“La receta del crecimiento alto económico no resolvió al problema de la vivienda digna, aunque también vale considerar que a cada gobierno local le cabe su cuota de acción. Las enormes divergencias entre provincias se deben fundamentalmente a la migración interna por falta de oportunidades. Muchas familias se trasladan a otras regiones, principalmente áreas metropolitanas”, aseguró la publicación.
“De acuerdo con un informe de SEL Consultores, especializados en economía y desarrollo, en los centros urbanos del país más de la mitad de la población alquila o vive en condiciones de carencias graves o hacinamiento. En todos estos hogares el crédito hipotecario barato solo es equiparable a un sueño: en uno de cada tres nadie trabaja en blanco y el promedio de sus ingresos familiares no supera los $4.500”, destacó.
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