Desinterés Oficial Malogra Una Experiencia Única A Nivel Nacional

Diario Norte Edición Digital - Domingo 09 de abril de 2006.

Hace apenas un mes, fue noticia nacional el que en la Escuela de Nivel Secundario 37, del Barrio San Cayetano, la abanderada y las escoltas sean tres alumnas-madres que volvieron a estudiar gracias a una guardería creada dentro de ese establecimiento por iniciativa de estudiantes y docentes.

Diarios, radios y canales de todo el país aplaudieron la idea, presentándola como un ejemplo digno de imitar. Pero ahora, absurdamente, la guardería dejó de funcionar por la falta de apoyo de las autoridades provinciales.

Por esa situación, desde el miércoles las alumnas con niños empezaron una protesta pacífica, con una sentada al ingreso del establecimiento escolar, que tiene el apoyo de la casi totalidad de los estudiantes.

El reclamo es simple: que el gobierno designe personal estable para la guardería, ya que hasta ahora se asignaba para esa tarea a beneficiarias del Plan Jefes de Hogar que no tienen una asistencia regular, y con frecuencia hay días en que el servicio directamente no puede recibir criaturas.

Un papelón: Las líderes de la protesta son, justamente, las tres chicas que tienen los mejores promedios y que portan la bandera del colegio. Ellas expresaron que quieren plantear la lucha para asegurar que las estudiantes que todavía tienen años de clases por delante no vean derrumbarse un servicio que a ellas les resultó fundamental para estar a un paso de obtener el título secundario.

La guardería comenzó a funcionar una década atrás, cuando algunas alumnas que daban a luz comenzaron a ir a clases con sus bebés para no tener que dejar de estudiar, y al no poder dejar con algún familiar a las criaturas.

La directora de entonces, Mirta Diez, tuvo entonces la idea de destinar un aula a una improvisada guardería cuidada por alumnas y docentes.

La Escuela 37 tiene una población escolar conformada en gran medida por chicos que son excluidos de otros colegios por diversas razones. Generalmente, porque al tener la obligación de trabajar no pueden cumplir horarios, o simplemente por imposibilidad económica.

En la escuela del Barrio San Cayetano, encuentran mayor contención, y un horario más apto, que va desde las 19 hasta la medianoche.

Por eso, la guardería, tras sus primeros pasos, se colmó de niños. Este año ya hay más de 50 chicos anotados, todos hijos de alumnos. Tener personal para atenderlos es fundamental.

El director actual, Hugo Noya, dijo que intentó salvar la situación volviendo a tentar a beneficiarias del Plan Jefes de Hogar "pero es difícil conseguir gente, porque nadie quiere asumir tanta responsabilidad por 150 pesos, y optan por hacer sus contraprestaciones laborales en otros ámbitos".

La salida es que el Ministerio de Educación o alguna otra dependencia del gobierno designe a personal en otras condiciones, ya sea mediante un contrato o la asignación de horas cátedras.

De momento, las respuestas brillan por su ausencia, y hay decenas de chicas que evalúan seriamente la posibilidad de dejar de estudiar por no tener dónde dejar a sus hijos.

(Pero para hacer propaganda con todos los materiales que entregan a las escuelas, el gobierno sí tiene plata ... )