El Día Del Maestro, Con Un Gran Déficit Educativo Y Social

Diario Norte Edición Digital - Martes 11 de septiembre de 2007.

Lejos de lo que era un tradicional festejo, el Día del Maestro pasó a ser una jornada de reflexión pero especialmente de cuestionamientos por la difícil situación que vive el sector, donde en cada conversación sobrevuelan los problemas de la educación y el gran déficit que existe en la provincia y el país, que llevan a que las aulas pasen mucho tiempo vacías y los maestros ganando las calles para reclamar reivindicaciones salariales que permitan no figurar entre los índices de pobreza.

Lo triste es que esto ya no se convirtió en un hecho aislado y todos los años se van repitiendo las mismas frases e historias, donde queda al descubierto que la educación de los chaqueños va perdiendo terreno sin que nadie haga algo para que esto se revierta y como siempre los principales perjudicados son los alumnos, que continúan sin completar los objetivos anuales diagramados, por lo que van pasando de año encadenando desconocimiento, los que con el tiempo salen a la luz a la hora de los ingresos a las universidades.

Esta situación lleva a que desde distintos ámbitos miren azorados la crisis educativa, y crean urgentes programas especiales que sólo sirven para tapar bajo la alfombra un problema estructural de arrastre, que tiene como punto más visible las medidas de fuerza de los docentes, pero que sin dudas tiene anclajes mucho más profundos, en la cual el gobierno no tendría que mirar a un costado.

El Chaco ha mantenido una constante de no completar los días de clases comprometidos a nivel nacional, también de acortar los programas y ajustar contenidos para evitar la repitencia de los alumnos.

Todo esto siempre generó posiciones encontradas entre los padres de los estudiantes quienes a pesar de reclamar a los responsables de llevar adelante las políticas educativas provinciales, también endilgan responsabilidades en los maestros de tener a veces conductas inflexibles, lo que también provoca falta de equilibrio en los reclamos y en las soluciones.

En medio de esta crítica situación sigue intacto que el maestro es sin duda el pilar fundamental en la formación del individuo fuera de la familia.

Se considera el maestro como los segundos padres del niño que se está educando, por eso nadie duda en que los entes públicos que tengan que ver con el tema, debieran ofrecer un máximo esmero en todo lo que se refiere al maestro como es el caso de ofrecerles un salario digno, construcción de escuelas, mejoramiento profesional constante en le tiempo, logrando así, que la sociedad sea mas rica en conocimiento y no caer en la ignorancia que es la mas grande vulnerabilidad de los pueblos.

En este contexto, este 11 de septiembre hay quienes se permiten celebrar, recordar o ejercer un rol más crítico en su día, pero no sin olvidar sus raíces.